Preparar berenjenas a la parmesana (Parmigiana di melanzane) es muy fácil y es un plato barato y muy suculento, capaz de saciar el apetito hasta al más tragón. Por lo tanto, aunque purgar las berenjenas y freírlas es algo más entretenido, repito, que no difícil, vale la pena prepararlo, porque con poco más arreglas una cena o una comida, que dejará a los invitados, vegetarianos incluidos, más que satisfechos en todos los sentidos.
Las berenjenas a la parmesana no deben su nombre ni en la ciudad o la provincia de Parma, ni al queso parmesano que, en muchas versiones se incluye en la receta. El plato es reconocido oficialmente como siciliano y se dice que parmigiana deriva de la palabra parmiciana, también en siciliano, que se refiere a los listones que forman una persiana, imagen que recuerda a las capas de ingredientes que componen la parmigiana di melanzane.
Sin embargo, yo he preparado una parmigiana a la napolitana que, a diferencia de las de otros lugares de Italia, lleva mozzarella, ya que a mí me gusta mucho más así.
Espero que la disfrutéis tanto como yo!
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La ficha
- 2 berenjenas medianas
- 250 g de mozzarella
- 500 g de tomate de pera maduro rallado (sin piel ni las semillas y la parte gelatinosa que las rodean)
- 1 cebolla mediana
- 80 g de parmesano rallado
- 10 hojas de albahaca
- 100 g de harina de trigo
- Aceite de oliva virgen
- Sal
- Pimienta negra
- Cortar la cola a las berenjenas y cortarlas en láminas de medio cm. aprox. (Si se prefiere, se pueden pelar las berenjenas completamente).
- Salar las láminas de berenjena con sal gruesa y colocarlas a capas dentro de un colador. Tapar con un plato y colocar encima algún objeto pesado para pensarlas. Dejar así durante una hora. Veréis que sueltan un poco de agua marrón. De esta manera se elimina el punto amargo que a veces tienen las berenjenas.
- Cortar la mozzarella en láminas finas, envolver las láminas con papel de cocina y dejar en la nevera hasta el momento de utilizarla. Así se elimina el exceso de agua.
- Sofreír la cebolla cortada muy pequeña con un chorrito de aceite.
- Cuando la cebolla esté cocida, añadir el tomate rallado, previamente pelado y vaciado de semillas y la gelatina que las rodean. Sofreir la salsa a fuego moderado por media hora- tres cuartos o el tiempo que necesite para perder toda su aciditat. (Depende del tipo de tomate).
- Cuando el sofrito esté casi a punto, salpimentar. Añadir tres o cuatro hojas de albahaca, remover y apagar el fuego.
- Lavar las láminas de berenjena con agua fría para eliminar los restos de sal.
- Secar las làminas de berenjena con papel de cocina y enharinarlas.
- Freír en aceite abundante y, una vez fritas, depositarlas sobre un plato cubierto con papel de cocina, para que pierdan el exceso de aceite.
- Precalentar el horno a 160 grados.
- Untar con aceite la bandeja que se utilizarà para hornear la parmesana de berenjenas.
- Alternar capas de sofrito, de berenjena, mozzarella, alguna hoja de albahaca, sofrito y parmesano, como si se tratara de una lasagna.
- El último estrato debe ser cubierto con parmesano en abundancia.
- Hornear la bandeja a 160 grados durante media hora.
- Gratinar la bandeja durante los últimos 5 minutos.
2 Comentarios
Claudio
Nos encanta tu receta pero nosotros la hacemos un poquito mas sencilla, pero me imagino que estara’ buenisima lo mismo 🙂
Mia Mattarello
Gracias por tu comentario, Claudio! Claro, esta receta se puede preparar de diferentes maneras, lo importante es que sea a vuestro gusto! Saludos!