Atención: Pelar habas y alcachofas dejan las manos un poco marrones y cuesta un buen rato sacarlo. Usa guantes, si quieres evitarlo.
Sacar las habas y los guisantes de las vainas, si no los has ya comprado limpios.
Picar la cebolla.
Pelar las alcachofas eliminando las hojas exteriores más duras y el centro "leñoso" de la parte más interna. Cortarlas a láminas finas. Si no van a ser usadas inmediatamente, meterlas en agua con un chorrito de limón para que no se oxiden.
Pochar la cebolla en una paella con 3 cucharadas de aceite de oliva, a fuego medio.
A la que empiecen a coger color, alzar un poco el fuego y añadir las alcachofas y la cayena, si te gusta picante.
Al cabo de un par de minutos, añadir las habas.
Pasados 2 minutos, añadir los guisantes.
Al cabo de otro par de minutos, echar el vino blanco.
A la que el alcohol se haya evaporado, (cuando ya no huela a alcohol), bajar el fuego a entre lento y moderado, añadir un par de cucharones de agua, sal y pimienta a gusto.
Remover, tapar la paella y dejar pasar 10 minutos.
Vigilad en todo momento lo que estáis haciendo. Dependiendo de las verduras, la paella y el fuego, los tiempos se pueden acortar o alargar un poco. Vigilad que no se queden las verduras sin líquido, y añadir un poco de agua, si es necesario.
Probar que las verduras estén en el punto de cocción que os interese, rectificar de sal, si es necesario, y añadir el perejil y la menta.
Apagar el fuego, remover y servir la Vignarola al cabo de un minuto de reposo.