Trío de bruschette de verano, hoy: bruschetta caprese, bruschetta con berenjena y calabacín, bruschetta con sardinas y rúcula. Una solución para cualquier hora, fresca, rápida y, encima, en los casos que os presento, muy sana. La bruschetta es uno de los antipasti más tradicionales de Italia, especialmente de la parte central del país. La base es siempre una rebanada de pan del día anterior, ya que, por cierto, es uno de esos platos humildes, nacidos para aprovechar alimentos que ya no están en su punto, teóricamente, óptimo.
Se tuesta o grilla el pan y, a partir de ahí, prácticamente lo que se quiera, como ocurre en el caso de un bocadillo. En Italia normalmente se hacen con pan de harina de grano duro y, en algunas regiones, sin sal. Mientras estaba en Italia me acabé aficionando a las bruschette de pan sin sal. Igual son manías mías, pero me daba la sensación de que me ayudaba a sentir más nítidamente el sabor de los otros ingredientes.
La primera vez que fui a un restaurante de Roma en el que tenían bruschette, cuando me enteré de que “la semplice” era una rebanada de pan tostado con un chorro de aceite casi me indigne. Me parecía un poco sinvergüenza, que quisieran hacer pasar como entrante una cosa del género, por mucho que hubiera gente alrededor que se lo estuviera comiendo con cuchillo y tenedor. Ah, pero, cuando la probé …¡ Qué pan, que bien tostado y, qué aceite! ¡Fantástica! No hay nada más cierto que, si los ingredientes son de buena calidad, con poco basta para sentir que estás saboreando un plato digno de un rey.
Como es la primera vez que escribo una entrada de bruschette y soy consciente de que con el calor que hace, algunos tenéis menos ganas de cocinar, por no decir que, si estáis de vacaciones igual os apetece mucho más pasar el tiempo con otras cosas, os enseñaré a hacer tres muy fáciles. Cabe decir también, que son de lo más frescas y ligeras. La caprese es de las más típicas. Como su nombre indica no es más que la famosísima ensalada caprese con mozzarella, albahaca y tomate hecha bruschetta.
La de berenjena y calabacín conlleva 5 minutos más de trabajito, pero decidme cualquier otro plato que luzca igual de bonito y que no te obligue a invertir 5 veces más tiempo. Si os ha sobrado mozzarella y os apetece, podéis añadir un poco. La de sardinas no es que sea muy típica que digamos, y menos con tomates de Montserrat, que son de aquí. Confieso también, que era la primera vez que la hacía, pero ha valido la pena. No os arrepentiréis.
La ficha
- Ingredientes para 1 bruschetta caprese:
- 1 Rebanada de pan redondo o cualquiera con la miga bien densa, a poder ser del día antes
- 1 tomate bien rojo y maduro
- 6 aceitunas negras sin hueso
- 40 g de mozzarella
- 2 hojas de albahaca
- 1 diente de ajo
- Orégano
- Aceite de oliva
- Sal
- Ingredientes para 1 bruschetta de berenjena y calabacín:
- 1 Rebanada de pan redonso o cualquiera con la miga bien densa, a poder ser del día antes
- 5 rodajas de berenjena
- 5 rodajas de calabacín
- 2 tiritas de pimiento rojo en conserva
- 1 diente de ajo.
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de vinagre de Módena
- Sal
- Perejil
- Ingredientes para 1 bruschetta de sardinas y rúcula:
- 1 Rebanada de pan redondo o cualquiera con la miga bien densa, a poder ser del día antes
- 2 sardinas de lata
- 3 rodajas de tomate de Montserrat o de ensalada.
- 10 hojas de rúcula
- Medio diente de ajo
- Aceite de oliva
- Pimienta
- Sal
- Bruschetta caprese:
- Quitar la cola al tomate, cortar en dados y ponerlo en un bol.
- Añadir la mozarella al bol, también cortada en daditos.
- Cortar las aceitunas en rodajas y añadirlas al resto de ingredientes.
- Cortar las hojas de albahaca con los dedos, (así se marchitan menos)
- Aliñar el contenido del bol con una pizca de orégano, la albahaca, sal y aceite de oliva.
- Tostar el pan, frotar el ajo por el lado en el que pondréis los ingredientes y colocar encima el contenido del bol.
- Si se desea, se puede adornar con alguna oliva entera o ramita de albahaca.
- Bruschetta de berenjena y calabacín.
- Calentar la plancha y, cuando sea caliente poner un chorro de aceite y las rodajas de calabacín y berenjena.
- Dar la vuelta a las verduras, para que se hagan por ambos lados.
- Preparar una vinagreta con el aceite, el vinagre, la sal y el medio diente de ajo, previamente picado.
- Tostar la rebanada de pan.
- Aliñar las verduras con la vinagreta y colocarlas encima de la rebanada de pan.
- Añadir el par de tiras de pimiento, un poco de perejil picado y un chorrito de aceite final.
- Bruschetta de sardina.
- Cortar por la mitad las sardinas y quitar la espina.
- Tostar la rebanada de pan y frotar el ajo por el lado en el que pondréis los ingredientes
- Colocar las rodajas de tomate sobre la rebanada y aliñar con un poco de sal y pimienta.
- Añadir las hojas de rúcula y las sardinas.
- Aliñar la bruschetta con un chorro de aceite.
